Feed the Children distribuye $400 millones de alimentos y artículos de primera necesidad a familias de todo EE.UU.

En la actualidad, 1 de cada 5 niños de EE.UU. se enfrenta a la inseguridad alimentaria y el número de familias que pasan penurias sigue aumentando. Por eso, crear un mundo en el que ningún niño se vaya a la cama con hambre sigue siendo el motor diario de Feed the Children. 

Feed the Children ha publicado recientemente su informe anual para el ejercicio fiscal 2023, en el que destaca los programas de la organización y su impacto global para acabar con el hambre infantil. El año pasado, la organización sin ánimo de lucro proporcionó más de $400 millones de alimentos de larga duración, artículos esenciales para el hogar y productos de cuidado personal a niños y familias de 40 estados de Estados Unidos. La organización se enorgullece de haber distribuido 60,5 millones de comidas en nuestras comunidades internacionales el año pasado. En todo el mundo, Feed the Children distribuyó 94,3 millones de libras de recursos a más de 15 millones de personas en colaboración con su red de socios. 

"Estamos entusiasmados con la repercusión que Feed the Children ha podido tener este año. Ciertamente no podríamos haberlo hecho sin la generosidad de nuestros fieles colaboradores y nuestra red de socios dedicados", dijo Travis Arnold, presidente y CEO de Feed the Children. "Y ahora sabemos que debemos estar a la altura del creciente desafío. Cada día, los padres tienen que tomar decisiones difíciles entre poner comida en la mesa o pagar las facturas. Debemos hacer más". 

El cambiante panorama de la ayuda alimentaria sigue planteando nuevos retos a los hogares vulnerables. Este verano, más niños que nunca podrían enfrentarse a una mayor inseguridad alimentaria. Recientemente, 15 estados se negaron a participar en el programa EBT de verano ampliado, dejando a 9,5 millones de estudiantes elegibles sin este recurso. Se adujeron diversas razones para no participar, pero una consecuencia está clara: este verano habrá más niños hambrientos que en años anteriores.

Feed the Children sigue centrada en ampliar sus capacidades para llegar a más personas y alcanzar un nuevo nivel de servicio a mayor escala. Con una amplia red de socios comunitarios en todo Estados Unidos, la organización está preparada para actuar y garantizar que los niños sigan recibiendo los alimentos que necesitan para crecer y prosperar. Feed the Children cuenta con cinco centros de distribución estratégicamente situados en todo el país, que actúan como centros críticos para la entrega de suministros que ayudan a las familias a superar los retos del hambre y la inseguridad alimentaria. La organización también está dispuesta a ampliar su programa de verano Feed & Read a otros estados que ahora se enfrentan a la reducción de las comidas de verano para los niños.  

Para las madres como Sabina, recibir alimentos y productos básicos puede suponer muchas emociones. 

"Me di cuenta de que cuando mis hijos pensaban que no tenía dinero para comida, intentaban no comer. Dicen: 'Mamá, no tengo hambre', pero yo sé que tienen hambre", explica. "Tener estos recursos me permite no sentirme fracasada. Mis hijos pueden ir al colegio y tener la energía que necesitan durante todo el día".

En sus continuos esfuerzos por hacer frente a la creciente crisis del hambre infantil, la organización pretende satisfacer las necesidades inmediatas de las familias y facilitar soluciones sostenibles para el futuro de los niños, transformando al mismo tiempo las comunidades, tanto en Estados Unidos como en el resto del mundo. Mantiene su compromiso con la convicción de que los niños que hoy carecen de acceso a alimentos suficientes pueden, con ayuda, convertirse en adultos autosuficientes y prósperos cuyos propios hijos disfrutarán mañana de una vida de seguridad alimentaria.

Si desea más información sobre la labor de Feed the Children para acabar con el hambre infantil en Estados Unidos, visite feedthechildren.org.