Salud de Exodus

Los padres de Éxodo sabían que a su hijo le pasaba algo terrible. 

La desnutrición infantil no es infrecuente en la ciudad de Gulu (Uganda), donde viven Gloria y John con sus tres hijos. Gloria y John conocían a muchas otras familias con niños cuyo crecimiento estaba atrofiado. Conocían a familias que habían perdido a sus hijos, viéndolos desvanecerse trágicamente mientras la ayuda permanecía fuera de su alcance e inaccesible.  

Pero como ya habían visto desnutrición antes, sabían que el caso de Éxodo era peor. Estaba empeorando rápidamente. Siempre estaba enfermo. Tomaba el pecho con regularidad, pero seguía perdiendo peso.  

En el tiempo transcurrido desde el nacimiento de su segundo hijo menor, se había abierto un nuevo centro médico mucho más cerca del hogar de la familia: el Centro de Salud Laroo III, que ofrecía un programa de alimentación suplementaria mantenido por Feed the Children.  

"Éxodo estaba muy débil cuando lo admitieron en el programa", dice Gloria. "(Eso) me tenía preocupada y estresada". 

Exodus fue inscrito rápidamente en el programa, donde recibió una fórmula especial enriquecida con vitaminas y minerales. Esta fórmula se diseñó específicamente para niños desnutridos y puede significar la diferencia entre el retraso del crecimiento y el desarrollo normal de la infancia. 

Otras pruebas diagnósticas realizadas en el centro de salud también revelaron la causa de la enfermedad de Exodus. Sus padres lo habían hecho todo bien, pero en su pequeño cuerpo ocurrían más cosas de las que podían imaginar. Le diagnosticaron anemia falciforme.  

La anemia falciforme es una enfermedad genética que afecta a los glóbulos rojos. Los niños que la padecen suelen ser menos activos, propensos a las infecciones y con bajo peso. En el caso de Exodus, lo primero que había que hacer era conseguir que comiera y tuviera un peso saludable.  

"El programa ayudó mucho a mi hijo y estoy muy agradecida", dice Gloria. "A Éxodo le encantó, y ahora tiene muy buen apetito". 

Hoy, Exodus está creciendo y prosperando. Sigue sufriendo brotes ocasionales causados por la anemia, pero gracias al diagnóstico del centro de salud, su familia está preparada y sabe cómo mitigarlos.  

Historias como la de Exodus ilustran por qué sus donaciones a Feed the Children son tan importantes. Los niños como Exodus necesitan alimentos a corto plazo, pero también pueden necesitar tratamiento médico adicional más adelante. Gracias a amigos como tú, él dispone de esos recursos, y los padres de otros niños enfermos pueden consolarse sabiendo que también ellos reciben atención.  

En comunidades de todo el mundo como la ciudad de Gulu, su ayuda también proporciona programas de formación agrícola y de otro tipo que ayudan a las familias a obtener ingresos adicionales. Cuando donas a Feed the Children, das material escolar y acceso a la educación para que los niños tengan más oportunidades de una vida mejor. Y otros programas que apoyas -que amplían el acceso al agua potable, el saneamiento y la nutrición- les ayudan a mantenerse fuertes y sanos.  

Juntos podemos ayudar a construir el futuro, un niño como Exodus cada vez.