
El efecto del hambre en la educación
Las listas de material escolar contienen artículos como lápices, papel, pegamento, rotuladores y cuadernos: todas las herramientas que un niño necesita para tener éxito en la escuela. Pero falta algo importante. Los alumnos necesitan comida para rendir al máximo en clase.
Uno de cada cinco niños estadounidenses sufre inseguridad alimentariaLa inseguridad alimentaria puede poner en peligro la salud y el bienestar del niño. La inseguridad alimentaria también puede afectar a la educación del niño. No tener una nutrición adecuada convierte la escuela en un reto en varios sentidos. Y esto empieza pronto.
Una buena nutrición es fundamental para el desarrollo del cerebro y el aprendizaje desde la infancia. Cuando los niños van a la escuela, no tener suficiente comida o no comer suficientes alimentos nutritivos pone a los niños en desventaja. Los expertos afirman que una mala alimentación puede socavar la preparación escolar de los niños, que puede ser un indicador del éxito académico en el futuro.. Los estudios han demostrado que los niños que sufren inseguridad alimentaria en sus primeros años de vida carecen de las mismas oportunidades para tener éxito en la escuela que los niños que no padecían inseguridad alimentaria.

No sólo los niños pequeños se ven afectados cuando no tienen suficiente para comer. Los efectos siguen al niño y empeoran si no se aborda el problema. Los expertos afirman que los niños con inseguridad alimentaria tienen más dificultades para relacionarse con los demás y más probabilidades de repetir curso.
Todos podemos sentirnos identificados con el hambre y la falta de concentración, pero ¿y si es hora de hacer un examen? Según un estudio realizado en Carolina del Norte, cuando las familias de los estudiantes se quedaban sin prestaciones del SNAP durante un mes, sus resultados en los exámenes bajaban.. La inseguridad alimentaria no sólo se traduce en peores resultados en matemáticas y lectura, sino que también puede provocar más ausencias y retrasos. De hecho, los estudiantes con inseguridad alimentaria tienen menos probabilidades de graduarse en la escuela secundaria..
También hay contratiempos emocionales y sociales relacionados con la escuela cuando un niño no tiene suficiente para comer. La escuela es algo más que leer y escribir, es un momento de crecimiento y desarrollo social. Los alumnos que sufren inseguridad alimentaria tienen más dificultades para hacer amigos y establecer vínculos.
Aunque el Programa Nacional de Almuerzos y Desayunos Escolares es muy útil para combatir el hambre de los estudiantes, no ha resuelto completamente el problema. ¿Por qué? Puede que las familias de algunos alumnos no reúnan los requisitos para acogerse al programa. O no rellenaron la documentación necesaria. Y aunque los alumnos desayunen y almuercen en la escuela, no siempre saben si cenarán en casa.
Por eso necesitamos a personas como usted, comprometidas a ayudar a los niños a obtener los alimentos que necesitan para crecer sanos y con éxito. Juntos nos aseguramos de que los niños y sus familias reciban los alimentos y productos de higiene básicos que tanto necesitan. Tu donación llega a los estudiantes más vulnerables a través de nuestras Salas de Recursos Escolares y el programa de mochilas, haciendo posible que los niños empiecen el año escolar alimentados y listos para aprender.